MANUAL SANFERMINERO

04.07.2017 19:55

 

             

            ¿Te pegas el año tachando los días que quedan para Sanfermines y luego te quedas chafado porque no alcanzan tus expectativas?¿No das con las fiestas ideales porque no suceden como las habías planeado? ¿Disfunción eréctil? ¿Eyaculación precoz? En las dos últimas no puedo ayudarte, querido lector, pero en las dos primeras, ¡¡sí!! Te presento la versión 2017 de tu ansiado y tradicional artículo sanferminero, donde vas a poder acceder de forma completamente gratuita a un magnífico y eficaz manual que evitará que sufras determinadas frustraciones durante nuestras amadas fiestas, haciendo que este día 15, te sientas –además de hecho un despojo, un residuo humano– completamente satisfecho con tu papel en éstas:
 
  • Ya que todavía quedan dos días, y que las predicciones meteorológicas son un tanto inestables, has de saber que por más que mires dichas predicciones cada quince minutos, el tiempo no va a mejorar… hazte a la idea, y que te valga también para años venideros.
 
  • Vamos a ver, si durante todo el año te ignora, hagas lo que hagas y digas lo que digas, ¿qué te hace pensar que durante Sanfermines va a ser diferente? ¿En serio crees que le vas a empezar a gustar con esa camiseta de San Fermín’98 que regalaban con el diario, que tiene el estampado desteñido y cuya tela se transparenta tanto que deja entrever tus pezones? Sí, va a ser eso, que igual con lo de los pezoncicos, se vuelve loca… anda queeee… Exacto, ya lo vas pillando: tira a por otro cubata, sí.
 
  • Tu novio es un garrulo durante todo el año, y conforme pasa el tiempo, la cosa no va a mejorar… no sé… si fueras creyente quizá el Patrón te echaría un cable, pero eres atea convencida desde que te expulsaron de las Carmelitas por decirle a la Hermana Martina aquello sobre la inverosimilitud de la virginidad de la Virgen María, explicándole tu versión sobre cómo hizo al Niño Jesús… Por tanto, ¿qué te hace pensar que en Sanfermines se va a comportar como una persona decente? O, directamente, ¿qué te hace pensar que se va a comportar como una persona? Sí, eso es, es el momento de dejarlo: él no se dará cuenta hasta llegado el día 15, Pamplona está llena de australianos cachotas de metronoventa y tienes unas ganas locas de agarrarte un buen pedo con éstas, que ya casi ni os veis desde que se empezaron a casar y a tener niños.
 
  • No, mi chico, no… Tus hijos no va a tener piedad contigo mañana por la mañana cuando se levanten a las ocho y te vean resacoso perdido arrastrando los pies por el pasillo. Así que tú sigue dándole al pimple y diciendo aquello de “Me echo una más y me voy a casa…”, que seguramente mañana se compadezcan de tu lamentable estado y se dediquen a pintar toda la mañana sin decir ni pío ni querer ir a los gigantes ni a las barracas.
 
  • Claro, sí, ¡buena idea! Tú no te cojas fiesta en el curro ningún día que total, este año no tienes muchas ganas de Sanfermines y cada vez te gusta menos la juerga, así que, ¿para qué? Luego cuando salgas todos los días hasta las cuatro y vayas a trabajar cual zombie de peli de los 80 –de los de The Walking Death, no, que ésos dan demasiado miedo– cada mañana, volverás a repetir aquello de “El año que viene, me cojo fiesta o me voy a Calafel, pero otra vez esto, ni de globo…” Y encima te lo crees, tan convencida, tan ancha… como si te lo hubieras pasado mal, máxime sin tener que aguantar al garrulo de tu –recientemente– ex.
 
  • Ese gin-tonic –o lo que demonios sea lo que te estés bebiendo en tu vaso de plástico– sabe a rayos y centellas y encima has pagado un pastón por él. No haces más que jurar en arameo por la estafa de la que eres víctima año tras año en cada garito de lo viejo. Pues nada, si tan fino se te ha puesto el morro con el paso de los años, te vas a un sitio chic de estos del ensanche –La Carbonera, el Che, el Sitio, La Rúa– que ahí ya te pondrán un Gin-Tonic de esos en copa elegante de vidrio y con media ensalada aromatizando tu brebaje mágico. Ya verás, la clase y el glamour que vas a tener a la hora de cortejar a las chicas que frecuentan esos locales, que si no fuera por el pañuelico, parecerían sacadas de una discoteque de Ibiza…Y tú mientras ahí, con tu copazo de diez pepinos –en los dos sentidos: te ha costado 10 Euros y lleva flotando diez pepinos cortados a rodajas–, con un caché y una clase que parecerías también sacado de la zona VIP de la Space, de no ser porque llevas puesta tu camiseta de San Fermín’98 y porque hueles que apestas… ¡Lo has pillado, eso es!: pide un vaso de plástico y vuélvete a las peñas que estabas más guapo, anda…
 
  • Sí, lo has hecho muy bien, tu novio era un garrulo y has hecho bien lo que hiciste. Pero claro, ahora vas y te das cuenta de que aquel que tenías fichado desde antes de empezar con tu ex y por el que tanto suspirabas cada vez que le veías pasar, en mitad de la noche y tras doce horas de pedo, es otro puñetero zopenco… ¡¡Claro!! Si mira que has repetido veces la frase: ¡son todos iguales! Ya sólo queda creérsela de verdad y actuar acorde a ésta. Pero bueno, eso ya para a partir del día 15, tarea para el verano, llamémosle el Vacaciones Santillana de la reciente soltera…. Ahora lo que tienes que hacer es hacerle un poquico de caso a Marta, que para un día que sale, está ahí más sola que la una…
 
  • Vamos a ver, colega, te pasa cada tarde que vas a los toros y es bien fácil entender la explicación científica: si preso de la ansiedad por echarte el primer cubata, abres la bolsa de hielos lo justiiiico para que te quepa la mano vacía, luego, cuando te la llenas de hielos no la puedes sacar porque una mano llena de hielos ocupa más volumen que una vacía. Y al no entender esto, todos los años la misma canción: tú haciendo movimientos violentos y convulsivos, que pareces un perro enganchado tras el coito, para sacar la mano de la bolsa… y todo por no hacer el agujero un pelín más grande a la primera. ¡¡Ánimo, campeón, que este año puedes!!
 
  • A ver, que ya tienes cierta edad para seguir echándole la culpa de tu vomitona matinal al kebab que te has recenado de camino a casa. Vale que es una carne que nadie sabe de dónde sale ni de qué animal es –eso si es de un animal…–, pero digo yo que los varios cubatas y las innumerables cañas que te has echado con Marta la noche anterior, ­–“Vamos, Marta, no seas moñas, para un día que sales…”– tendrán algo que ver, ¿no? Así que esas excusas que le ponías a tus padres cuando vomitabas siendo una adolescente, habrá que ir desechándolas, porque ya no engañas a nadie. Ni qué decir tiene que a tus padres tampoco les engañabas, pero bueno…
 
  •  Sí, llevas un buen rato saboreando este artículo, junto con otros miles de lectores asiduos del blog y, hasta el año que viene no vas a poder gozar de la lectura de otro similar, así que el único remedio que se me ocurre es que disfrutes de los Sanfermines teniendo siempre presente este valioso manual….
 
 
¡¡¡VIVA SAN FERMÍN!!!
GORA SAN FERMÍN!!!
¡¡¡YA FALTA MENOS!!!
 

        Charly Azanza